Negar que te pienso y tú me piensas es como negar que existe el viento y la suave caricia que excita al sentimiento.
Nunca se le debe negar a la vida una dulce sonrisa.
Me gusta la mujer que alegra el corazón como lo hace la música… y aunque sea invierno, nos perfuma con el aroma de la primavera que como el cerezo consigo lleva.
Pero bueno, en esta vida todos tenemos algo de sabios, de necios, de cuerdos, lunáticos y locos.
Es por eso, me encanta la mujer que con su ternura y cariño hace del hombre un niño”...
© Enrique Palma... 2/12/2017... Granada... Andalucía... España...
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