Luciérnaga.
Una plática profunda que nos una a los dos, que nos diga de las caricias, de los besos y los sueños que compartimos juntos, hoy, tu y yo, y después más que deseos esos momentos de complicidad, donde las rosas sean de azúcar, donde la poesía se diga al oído, susurrando el amor bendecido, que recibo de ti y que te vengo a dar, sin miedos, no promesas vanas. Con poco tiempo o mucho que pases por mi casa, con todo eso te voy a recordar, que si te amo por ti mi bien eres ave al horizonte, cantándole al sol que le quieres alcanzar, y si el atardecer llega, que te convierta en luciérnaga para iluminar esta ilusion una vez más.
© Enrique Palma... (Derechos de autor)...13/3/2015…
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